viernes, 6 de marzo de 2009

SLUMDOG MILLIONAIRE: ¿NOS DEBE DE GUSTAR?


El triunfo del desvalido es algo que nos gusta a todos. Nos da esperanza al resto de los mortales, somos capaces de ganar todas las batallas, salimos en caballo blanco (porque antes solo recogíamos el excremento), y nos ganamos el corazón de la mujer de nuestros sueños, enfrente de sus casi 1,200 millones de indios.

Slumdog... retrata con crudeza el vivir en los barrios miserables de Mumbai, la violencia incesante, la explotación de niños y demás enfermedades muy de las sociedades enfermas, como la nuestra, en donde la lucha por lo correcto y lo bueno es una total estupidez.

Éste tratado fílmico, así le dicen, toca un nervio popular en ese sentimiento tan aspiracional como es el de convertirse en un millonario y lograr todos tus sueños. Es lo que le pasa a Jamal, un chico de la calle que se hace seleccionar para la versión del programa ¿Who wants to be a millionare? en su versión India. Es entonces que se desarrolla otro paralelo cuando es capturado por la policía y es torturado ya que lo consideran una farsa por saber las respuestas. Por coincidencia las conoce, no por saberlas, sino porque durante su vida ha estado en contacto con esa sabiduría de la calles y las puede responder. Mucha coincidencia y suerte de pronto no hace creíble el resultado final, pero qué importa porque es una fantasía y ya. La historia es soñadora está escrita por Vickas Swarup basada en su novela. Poníendola de una forma que se entienda mejor es una carta de amor a la India. La historia pareciera que está atorada entre una telenovela de las 8 y, una película para televisión que es para cine porque está repleta de clichés. Esto no es prometedor pero ante tal bulla y mercadotecnia nos dejamos llevar.

La Dirección de Danny Boyle aporta otra más de lo mismo: terminar con un nuevo comienzo y bailar de la alegría al final. Con el título ya sabemos que nos dan lo que nos venden. La resolución es muy importante para él, así como escoger la vida, una carrera, un trabajo una esposa y convertirnos a todos en seres equilibrados dentro de un caos impregnado en nuestras venas. Buena vibra que le dicen. La esperanza tiene precio si la comprás y luchás por ella.

Podemos discutir este idilio entre Hollywood y Bollywood a manera de tratado de más películas. Es muy claro que habrán más colaboraciones entre estos gigantes de la industria y muy pronto. El futuro inicia con Slumdog Millionaire.

Lo rescatable de la película son sus actuaciones. Todos lo manejan de forma creíble, incluso los niños, que son el alma a lo largo de la película, nos causan un gran apego; sufrimos por ellos. Es por empatía que queremos que triunfen y que se sientan realizados. Podemos dejar el aliento de la envidia en los vidrios de las ventas del centro comercial con tal de disfrutar plenamente ésta película.

Ahora bien, todos estos juegos o clichés dentro de la película los hemos visto en películas como Ciudad de Dios o Quiz Show. La diferencia radica en la actitud y el humor que queramos verla porque si exigimos realismo la película es un enorme fracaso y aunque su dirección, la fotografía, la edición, la música memorable y demás aspectos técnicos, son dinámicos; no hay otra cosa más que una fantasía y ya. Un comercial o infomercial si queremos ser despectivos.

El alboroto de los Oscar hacia la película no debe causar mayor aspaviento de ir al cines ya que va a sufrir de gran indiferencia como ha pasado con otras películas, que han ganado el premio mayor de la industria y Slumdog no la merecía... tal vez The Curious Case of Bejamin Button. Su destino podría ser como el de "Crash", olvidada totalmente en la rotación de la programación de cable. Podemos pasar la vida sin ver Slumdog.

Parece extraño el rumbo del cine últimamente: La realidad se hace fantasía y la fantasía como los comics, se convierten en algo más fuerte que la realidad y lo que queremos es ver comics. Para pensarlo. En resumen diversión y punto.

13 comentarios:

Fernando Ramos dijo...

Allan: Me parece que observás lo más obvio de la cinta. Hay un cosas profundas detrás de todos los clisés y el final feliz, es la historia que subyace la que interesa, es el trasfondo social lo importante. La película es fácil, en apariencia, pero es poderosa, por todo lo que evoca. La resolución de los conflictos lleva al final predecible, cosa necesaria, si se toma en cuenta que la historia es tipo Bollywood.

No es solo diversión. Benjamin Button si es solo diversión, hay mucha más profundidad en El lector.

Saludos

el VERDE !!! dijo...

no me llamó la atención para nada... tu post es eco de mis impresiones, o quizá prejuicos... en fin, como decis "Podemos pasar la vida sin ver Slumdog".

últimamente prefiero ver licas viejs, xq las de ahora son una mierda.

Allan Martínez dijo...

Fernando: La verdad es para debate. Es cierto el drama planteado es espinoso pero siento que todo fue muy dejado al azar, a la coincidencia para escalar ese sueño americano. Yo comprendo que así es ese tipo de cine fantasioso y aspiracional despertar creencias y fe. Creo que me la tomé muy en serio. Algo pasó en la película que no me hizo click. Yo veía la versión del programa gringo y me imaginé que una cosa así iba a pasar en una versión de cualquier otro país. Se me hizo predecible aunque me gustaron las actuaciones. Saludos.

Gracias por la recomendación de el Lector... no la he visto.

Mr Green: La película cae dentro de un rollo muy mercantilista y como un tratado de cooperación. Una relación con final feliz. Fue algo así como enamorar a alguien con bajar la luz y la luna pero bueno el resultado es ese y ni modo. Yo no la voy a extrañar.
Saludos amigo.

Gabriel Arana Fuentes dijo...

me parece que estas siendo severo. He visto ambas películas y creo qeu Button por alguna razón me hizo pensar en forest gump y digamos e fincher tiene ese algo de pelicula oscura que a todos agrada. Por otro lado slumdog es como vi en un post mezclar la miseria de india con un programa de tv. Son cosas que no tiene relación. Sin embargo nola compararía con ciudad de dios. pero encontré en el post cosa queno habia desifrado.

Unknown dijo...

Compañero Martínez! Aguas con andar confundiendo "hindúes" con "indios". Ni es lo mismo, ni es igual. Cuando vea la película, te la comento. Saludos.

Sergio Ramírez

Allan Martínez dijo...

Don Gabriel: Slumdog me pareció demasiado predecible, eso fue lo que me desencantó. Es que nadie se dio cuenta que iba a ganar y a quedarse con la chava desde el principio y que iba a saber las preguntas. Demasiado predecible. El único momento de tensión de la película es cuando dice otra respuesta de la que le dan. Se me hizo más interesante Button porque el chiste de la película fue el viaje. Yo prefiero Button en vez de Slumdog. Creo que Boyle tomó elementos muy simples y los combinó con lo poco que sabía de India. Ciudad de Dios tiene el plus que tiene una foto muy precisa de Brasil. Creo que tiene más recursos de drama y nunca sabés qué va a pasar.

Sergio: Gracias por la observación unos teclazos que se me fueron. Ya lo corrijo.

Pedro Alejandro dijo...

OOOO SI!! Es que ahora todo mundo ya tiene en su boca lo que es Bollywood. Ahora todos saben que la producción cinematpgràfica hindù es de las màs producctivas -que existen màs peliculas realizadas en un año que en USA-.

Esto lo estoy diciendo en forma sarcástica. Respeto tu opinión y la de los demás, pero también quisiera comentar que la mayoría de gente nunca le puso atención a las historias extraídas de este pueblo... hasta que ganó un Oscar.

Gracias por compartir tu opinión sobre la pelicula. Igual voy a verla.

Allan Martínez dijo...

Pedro Alejandro: Si, cabal pareciera un matrimonio por conveniencia. Mirala. La verdad es que hay que verla pero que sea necesario no lo creo. Gracias por tu visita Señor Socialité.

Duffboy dijo...

Nel pastel, brockets. Creo que sin clichés no existe cine, y querer contar una historia sin caer en un un lugar común es técnica y completamente imposible. Aunque tengo pendiente ver 28 Days Later, Slumdog Millionaire es la lica que Boyle necesitaba hacer superar la grandeza de Trainspotting.

Allan Martínez dijo...

Yo también creo lo mismo Mr Duffman peero, no hay que ser tan obvio ni tan descarados en robar tantas películas para presentar algo como la mejor película del año. Creo también que Trainspootting es insuperable. Un cine que refleja algo que es de rubro independientemente brillante. Saludos Mr Duff.

Seletenango dijo...

Jovenón pásese por Seletenango, le dejé alguín

Unknown dijo...

Compañero Duff Man, le recomiendo que vea Shallow Grave, es anterior a Traispotting.

Sds.

Sergio Ramírez

Unknown dijo...

Martínez! Ya vi la película, entonces ahora comento. Creo que usted "no se disfrutó el viaje". La gracia en esta película no está en el "final feliz" sino en el camino que siguen los personajes para conseguirlo. Con lo que Gabriel dice, de no entender la relación entre la miseria y la tv, tampoco estoy de acuerdo. Si de algo se vale la tv es de la miseria no solo material, sino "cultural", intelectual y hasta emocional del televidente. Creo que también es clave verla en el cine, la fotografía, la música y el montaje lo merecen. Visualmente se reconoce el estilo de Boyle(Director) y en lo personal me gusta más esta propuesta estética(fotografía) que la de Ciudad de Dios(con marcados orígenes en la publicidad, al igual que Amores Perros por citar algunos ejemplos). Y lo del Oscar... eso me tiene sin cuidado.

Saludos.

Sergio Ramírez