lunes, 28 de noviembre de 2011

PEARL JAM: EL PODER DE LA NOSTALGIA Y LA VITALOGÍA


Ver a Pearl Jam subido en un escenario es estar en otra dimensión. La sinergía que esta banda transmite es solamente una extensión de su leyenda. En un escenario imponente como el estadio de La Sabana en San José, Costa Rica son capaces de hacer temblar un recinto y poner a prueba la ingeniería China. La Sabana se me hizo como una nave extraterreste y de noche es posible escuchar, si se pone la oreja en el piso, las cinco notas de la película Encuentros cercanos del tercer tipo.

Las colas empezaron a eso de las 11 de la mañana. Para las 5 de la tarde era una cola de 5 kilómetros. La convivencia entre el tico y el chapín es interesante son amigos en casi todas las partes del mundo pero póngalos a competir y se rompen los vasos en la cara. Lo diré así: Ellos nos ven como "mexicanos de baja autoestima" y nosotros los vemos como "mexicanos wannabes", aaah el EGO. Tocaré ese tema en otra ocasión. Así que empecé con una cerveza imperial para mitigar un poco la ansiedad. Es otro post el de las cervezas, aunque no muy interesante. Yo, Gallo FOREVER. Debería de haber una camiseta así.

Ya dentro del estadio los que te registran y los de seguridad invitan a todos que a meterse rápido en vez de estar "guanaqueando", o esperando a tus amigos. McDonalds te regala un cancionero con las 5 canciones más importantes de Pearl Jam y un botón que colgué en mi gorra. Es nada más de quietarle la M del restaurante para que se vea muy bien.

Tres sets de baterías estaban instaladas en el gigantesco escenario. Los periódicos informaron que empezaria la banda "Las Robertas" que es una mezcla de indie/punk/surf/rock. Dos chicas tipo Joe Ramone en tratamiento de estrógenos Monserrat Vargas y Mercedes Oller y un baterista salido de Sly and The Family Stone llamado Franco Valenciano, iniciaron con su repertorio. Valenciano era el que ponía alma a la banda, las otras dos chicas bueno... necesitan un curso de cómo ser rockeras. Se quedaron paradas en el mismo lugar; nervios supongo. De hecho a esta banda la metieron a fuerza de calzador en la velada porque no habían invitado a ningún grupo nacional. Sospecho que lo mismo pasa en Costa Rica que aquí en Guatemala. No hay bandas que de verdad valgan la pena para ser incluidas en una opulencia musical así como ésta. El grupo tocó entre aplausos, cantos y burla. Le falta muchísimo a Las Robertas. Hay química y disfrutan tocar juntos y lo transmitieron a cuenta gotas pero es que es difícil con ese monstruo de público que llegó.

La banda X leyendas punketas de finales de los 70 dejó sentirse a partir de la primera canción. Reconozco que mi alma punketa sufre de enanismo jorobado en posición fetal. Sin embargo X salió con su actitud punk a romper oídos. Demostraron que son una super banda y suenan muy bien. La única canción que identifiqué y fue porque la anunciaron fue Soul Kitchen de The Doors, una versión acelerada y estridente de aquel éxito. El bajista John Doe lo recuerdo por los documentales de punk en VH1 me recordé la pelea que tuvo con la vocalista de la banda Exene Cervenka que fue lo que puso punto y final al grupo. El guitarrista Billy Zoom y el baterista D. J. Bonebreak completaban aquella formación sólida y rebelde. La última canción de la intervención de los X fue Devil Doll junto con Eddie Vedder y eso alborotó a todos.

A las 9:10 de la noche terminó X. Pearl Jam tenía programado salir a las 9:30 a tocar 26 canciones con un tiempo total de 2 horas y 30 minutos. Hay una regulación en Costa Rica que no puede haber ruido después de la media noche y por lo tanto el recorte musical. Allá no se puede dar mordida.

Un fondo de piano se escuchaba mientras la gente empezaba a apluadir. De la oscuridad aparecieron los gigantes. Go hacía su entrada rabiosa. Estalló La Sabana. Las luces epilépticas todas. Se acabó la espera. A partir de aquí creo que perdí la razón. Solo disfruté. Y es que son tus amigos de infancia los que vez ahí tocando. McCready virtuoso solista ya nos daba una pizca de lo que se venía: Olas de solos bluseros. Vedder sigue igual, electrizante saltaba como todos no ha pasado nada de tiempo en él. Cameron en la batería le da otro sonido a Pear Jam es muy vitamínico su aporte. Robusto. Animal entraba. Toda una canción de protesta. Ojalá los políticos la escucharán. Aquí todos contábamos desquiciados el One, Two Three four five, against one...

Corduroy quizá la mejor canción del Vitalogy. Otro himno a la rebeldía. A no caer de rodillas en contra de la traición. De las mejores canciones idealistas de la banda. Pensé que eras mi amigo pero creo, creo que te odio. Unthought Known es casi el abrazo de bienvenida de mis canciones preferidas de ese gigante album Backspacer. Este disco solo demuestra que Pearl Jam es lo que es hoy. Si alguien nunca ha escuchado a la banda, éste podría ser un disco para empezar. Hola Costa Rica decía Vedder con ese español traducido de Google pero vamos que se le perdona todo. Nos pidió que nos cuidáramo entre nosotros. Claro amigo bienvenido. Comatose de las rabiosas del disco del aguacate.

Empezaban los éxitos queridísimos. Elderly Woman Behind The Counter in an Small Town preciosa carta de amor. Simple y tierna como siempre. Given To Fly entrañable aunque para nada ceremoniosa como la versión del disco. Rápida y rockera. Era la que más fuerte cantaba este servidor por razones obvias. Un placer de canción. De verdad uno vuela. The Fixer fue otra que puso a saltar todos. Es optimista y las letras son himnóticas: Fight to get it back again, yeah yeah yeah. A correr por la vida; es un gran empujón. Deep del disco Ten no la pude identificar hasta el coro, pero qué importa.

La banda se tomó una pausa y de pronto Jeff Ament se adelantó un par de pasos y ejecutó los primeros acordes de Jeremy todo estalló. Me asombra como Jeremy se convirtió en una canción himno de estadio que trata sobre un hecho terrible como es una masacre. Seemed a harmless little... Vedder no lo insulta, creo que lo entiende mejor que nadie, aunque sabe lo que hizo, dentro de él, quisiera haber sido su amigo, conocerlo y deternlo. Sí, Jeremy no existiría pero es mejor salvar un alma. Pearl Jam no obstante, le tiene mucho respeto a esta canción. Por lo que significa, por su mensaje y la vida que les ha dado.

This is Supersonic, decía Vedder. De las veloces de Backspacer. Otra que me encantó que tocaran a toda velocidad. Qué corredera y saltadera loca teníamos todos. Alegre. Evenflow aparecía, uno de los clásicos por excelencia. La locura y su ternura. Intensa y hermosa. You Are, de las sorpresas de la noche. Muy eventualmente la tocan. La distorsión es un gancho que aquí se escuchaba estridente y violento.
You are a tower of / Strength to me / The darkening hour / Sees light again... again. Esta también la grité frente a la mudencia de mi alrededor. Me sentí orgulloso de solo saberla yo. Parecía que todos habían ido al baño o algo.

Daughter otra clásica del Versus. Regresaron todos a cantarla. McCready seguía con sus solos brillantes. Fue una gran idea del aguafiestas ponerse frente a él. Todo un showman y no es que Stone Gossard no lo sea su presencia es modesta pero McCready te mete en la canción. Why Go, seguía Ten tirando sus mejores canciones. Bastante clásico el repertorio. Vedder se puso la guitarra y Reviewmirror entró. Es de las mejores canciones de rock de la banda. Las guitarras van por todos lados rasgueo, ritmo y arpeguio tiene de todo y un solo armónico. Como si escaparan cuerpo, espíritu y el alma en forma de luz. Estalló todo el estadio cuando terminó. La banda lo daba todo. McCready otra vez.

Primera pausa y ni se sitió la primera hora del concierto. El escenario se puso azul y Vedder salía con una guitarra. Just Breath empezaba una daga de canción. Bella. Sobre la pérdida. Intentar detener todo en un suspiro. Decir lo que nunca se dijo en su momento. Conmovedora. Oceans... ésta no me la esperaba. La sentí tan próxima por estar ahí en Costa Rica, me tomé muy personal esta canción que va más allá de la crónica. Inexplicable, puedo decir, que me rompió.

Stone se puso su Les Paul amarillo-rojo y con el primer rasguño se vino Do the Evolution. Gritadera de todos. Otra vez estalló La Sabana. Era bello ver todo aquel relajo. Qué coro para el Aleluya son como esas veladas de Cash Luna dije a mis adentros. BECAUSE IT'S EVOLUTION BABY se gritaban tres vidas ahí.

Recuperándonos estábamos cuando State of Love and Trust reventaba el estadio. La euforía estaba al máximo. Y seguían los solos disparándose como truenos. Agradecíamos aquel estallido. Se tomó su tiempo para calmarnos y Black aparecía como otro abrazo. Es casi una plegaria a la que se fue, una letanía divina. Es un despedida increíble del drama más violento. Un "turuteo" como el trino de una golondrina, de los cielos más rojos, sin viento y con las heridas expuestas; ahí se contempla lo eterno del dolor. Betterman es como el morboso antiblack como la profecía de lo que quisieramos observar de la que nos dejó. El consuelo de que le va mal así, a lo mejor regresa. Ella escogió y la vida se encargó de llevársela. Tal verdad rompe con cualquier sentimentalismo. Y ella regresará con él. Y nosotros... bueno está por escribirse.

Last Kiss no me la esperaba pero fue bonito escuchar ese clásico de tragedia cincuentera. Esta es de Roger... Todavía pregunté ¿Qué dijo? porque no me lo creía. ¿Mother do you think they drop the bomb? Dejé de respirar. Algunos lloraban, o se decían: no es posible. Contemple la grandeza en ese momento y capturé la ola de incredulidad. Observé gran estupor. Todos se la sabían. Si nos viera Roger, me decía. El solo me hizo resperar de nuevo. Me angustié, tenía apretado el cuello y los ojos no aguantaron. Qué golpe.

Nos recuperamos de aquello con Once, seguía TEN y con Alive saltábamos era el momento de celebrar la vida. El grito del I'm still Alive. Jamas aquello fue tan cierto y para mi me di cuenta que estoy para nuevos retos. Toda una afirmación.

Rocking in a free world es para besar a Neil Young. Días antes de viajar a Costa Rica me puse a escuchar Chrome Dreams II de Neil un gran disco de rock clásico sin duda. Y como siempre Yellow ledbetter cerraba el concierto. La letra siempre desconcertante. Es una canción para cualquier interpretación. Creo que es un final abierto de que habrá más de Pearl Jam. Acabé muerto del cansancio pero esa será otra crónica. La Sabana se estremeció con el final. Sin palabras.









Fotos del periódico La Nación de Costa Rica.